Me repito y reitero que la felicidad, para mi la mayor de todas las metas que me pongo, sólo se consigue si se persigue.
A veces se complica... cuando parece que está ahí, al alcance de tus manos, se hunde el camino y caes. Entonces hay que ponerse el arnés, los pies de gatos, sacar las garras y a trepar. Todo esfuerzo tiene sus frutos y aunque a veces se vea bastante oscuro, siempre hay algún rinconcito al que aferrarte para continuar aunque sea con los ojos cerrados.
Hacia adelante, siempre!!
La oscuridad atraviesa
el cuerpo tembloroso,
inseguro de si mismo,
imagen de contorno discontinuo.
Se formaron en este mundo
torres infinitas
rozando el fin del universo.
Qué sería sin el susurro del viento...
acaricia para el alma
y beso para el tiempo.
Guía color rojo,
acentuada pasión sonora...
no sangran mis ojos,
sonríen mis manos
cuando pienso en alcanzarte
en el último estallido.
sonríen mis manos
cuando pienso en alcanzarte
en el último estallido.
¡Adelante, siempre adelante! y me encanta tu poema. Un saludo
ResponderEliminarAsí es!! :) Muchas gracias!! Un abrazo
EliminarTus palabras y tu actitud son las de una luchadora nata. Tus versos, los de una poetisa que sabe de la vida y de su belleza, aún en los momentos difíciles.
ResponderEliminarMe ha encantado, Elena. Como tú dices, ¡siempre adelante! :))
Un beso y feliz noche de lunes.
Ohh Julia, muchas gracias por tus palabras. Lo cierto es que la lucha es una constante en nuestras vidas, sólo hay que asumirlo y ser optimistas. Lo de los versos, sigo tú consejo de escribir lo que me guste y si además gustan a alguien más, pues me hace más feliz. Un abrazo!! Feliz Semanaaaa
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